Un gaditano ha desarrollado un videojuego para que los estudiantes de Primaria y Secundaria no tengan faltas de ortografía. El número de faltas ortográficas ha aumentado con el uso de los dispositivos móviles que ha provocado que se extienda a otros campos como trabajos, exámenes, etc. De este modo se ha creado DesafíoÑ, donde la enseñanza de la lengua española se une con las nuevas tecnologías. El videojuego consiste en una competición de baloncesto en la que el equipo Ñ tiene que superar diversas preguntas de ortografía y ampliación del vocabulario.

En mi opinión, creo que es un buen método, pues los niños aprenden diviertiéndose. Además esto demuestra que los videojuegos no tienen porque ser perjudiciales para la educación, sino que pueden estar en armonía y ayudar al aprendizaje. Creo que este método debía ser utilizado por el maestro en el aula, pues he comprobado que los niños se involucran más y participan en mayor medida utilizando estas tecnlogías y recursos que son divertidos y les rompe la rutina de las clases teóricas. Para ellos es un juego, pero para los maestros es una forma de educarles sin que les resulte una clase demasiado "pesada".